Con este título se publica hoy en “La Opinión” un artículo del cual nos hacemos eco.Cito textualmente:
Hace unos meses,el alcalde,Javier Losada,decidió proceder penalmente contra un conocido dirigente vecinal,Gerardo Crespo.No fue una decisión sensata de un gobernante democrático.Fue el impulso torpe de un político al que le molestan los vecinos y las críticas.Yel estado de derecho le colocó en su sitio,le dijo que en democracia no existe el delito de opinión y que los políticos tienen que servir a los vecinos que para eso les pagan.El movimiento vecinal tiene un grave problema.No es la falta de independencia,no es la falta de participación de la gente,ni siquiera que exista contaminación política en alguno de sus ámbitos.
El problema es el que tienen los vecinos,los comerciantes,los trabajadores,los hombres y mujeres que convivimos en esta bella ciudad.
El problema es que quién debería impulsar proyectos y abrir cauces de participación está pendiente de su desmesurada ambición política personal.
Este artículo lo firma Juan Saénz-Chas(Presidente de la Federación Asociaciones de vecinos.Salvador de Madariaga)
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